martes, 13 de diciembre de 2011

No estaba muerto, estaba tomando cañas.

Ni muerta, ni tomando cañas. No penséis que he dejado mi blog de lado por gusto o porque me haya cansado. No. Es verdad que hay veces en las que se me pierde la inspiración y, por más que trate de escribir una y otra vez, ni me salen las palabras ni se me ocurren temas. Pero os juro que no es el caso.

Lo que pasa es que la tecnología, en mi casa, se ha puesto de huelga. Pero toda. Y cuando uno deja de funcionar, días después el otro se solidariza con la causa y se replantea su trabajo. Y eso ha pasado. Hace unos meses mi portátil decidió que su vida debía llegar al final porque ya me había dado lo mejor de su vida, y se sentía un poco abandonado por mi desde que había terminado la universidad y no le tocaba con frecuencia.

Meses después, o sea hace unas semanas, el ordenador "grande" (el que viene siendo el de casa) decidió solidarizarse con la causa y hacerme un llamamiento. Como una novia desesperada a un novio, un toque de atención. "Ya no me quieres como antes, no me tocas y abrazas con tanta frecuencia" (y suelta una lágrima). Pues eso, pero sin lágrima y con un ruido entre Orco y Chewaka (no sé cómo se escribe, pero si "el pelos"). RIP.

Pero bueno, a rey muerto rey puesto, y aquí estoy con nuestro nuevo ordenador. Por fin puedo navegar, mirar mi correo todos los días, leer las noticias como solía hacer e, importante, escribir!!!!!!!!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario