lunes, 14 de marzo de 2011

Raros no, gracias

Si hay algo que odio en este mundo es la indecisión. Bien, voy a explicarme. La indecisión es una cualidad que tenemos todos en algún momento de nuestra vida pero que, utilizada con reiteración, es un coñazo. Es como el dicho de "una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad". Lo mismo.

A mí no me sirve de nada que una persona hoy me quiera como si el mundo se fuese a acabar y mañana me trate como si fuese el tercer árbol del parque de su barrio... seguro que a él le trata mejor. Pero bueno, lo dicho. ¿Qué le pasa a la gente? ¿Hay un virus por ahí que provoca indecisión? Dios, voy a vacunarme

Yo he llegado a la conclusión de que la gente está perdida. Te ve y dice: ohhh y luego dice: ahhh y así va el mundo. Si soy ahh, soy ahh siempre. No hoy ohh, mañana ahh. Así que voy a dejar mi mensaje claro:

"Hola, soy la que escribe esto. Si quereís aceptarme como soy, bienvenidos. No acepto un saludo hoy y un ignoramiento mañana. No. Ya somos mayorcitos. Si no pretendes aceptarme, bye. Hay muchos peces en el río, y bien buenos".

Espero que haya quedado claro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario